Instinto

Cuando no había medios de comunicación, cuando la información no circulaba, cuando los hombres y las mujeres vivían sin saber qué pasaba, no ya en la otra punta del mundo, sino en el pueblo de al lado, no les quedaba otro remedio que tomar decisiones y actuar basándose en su instinto.

Ahora que tenemos una evidente sobredosis de información, que no podemos respirar si no estamos conectados a la actualidad por todos los canales posibles; ahora que corremos el riesgo de empacharnos de información y acabar totalmente desorientados, también terminamos fiándonos de nuestro instinto.

Las nuevas tecnologías no se apartan, no se ignoran, pero se ponen al servicio de la humanidad que, en las decisiones importantes, acaba por volver a la palabra, al pensamiento, a las humanidades…